Santo Domingo.-El Ministro de Interior y Policía, Carlos
Amarante Baret, reveló que la desconfianza que genera la Policía Nacional en una
parte de la población contribuye a la ocurrencia de homicidios y feminicidios
porque en ocasiones las víctimas no denuncian a su agresor por temor a ser
delatadas por agentes que reciben la denuncia.
“Cuando vemos el caso de los homicidios, tenemos que alarmarnos, y aunque vienen bajando año tras año, tenemos que luchar para que esa tasa se reduzca”, reflexionó.
Amarante Baret dijo que para esta fecha en 2002 ocurrieron 2,268 homicidios y 1,198 en lo que va de año y que muchos de esos casos no tienen su origen en la delincuencia, sino por convivencia o feminicidios.
“Es increíble la facilidad con que los hombres deciden quitarle la vida a su compañera o a su ex compañera. Es un tema que tiene que ver mucho con la escuela, la educación y la formación hogareña, y debe reforzarse la capacidad del Estado para proteger y preservar la vida de las mujeres cuando se sientan amenazadas a través del Ministerio Público”, manifestó.
Reconoce que hay un problema de confianza entre el Policía y el ciudadana, una desconfianza que hace que muchas víctimas prefieran la callada a la denuncia.
Amarante Baret afirmó que desde el Consejo Superior Policial se viene trabajando arduamente para revertir esa falta de confianza, ya que desde el alto organismo se ha dispuesto o recomendado la cancelación de unos 7,068 agentes, desde oficiales superiores hasta subalternos, clases y alistados por la comisión de faltas graves.
Se trata, dijo, de estar acorde con la política y el deseo del presidente Danilo Medina de que se generen mayores niveles de seguridad ciudadana y de reducción de los homicidios y feminicidios. Indicó que esas separaciones de quienes definió como malos policías se han producido al amparo de lo que dispone la nueva Ley Orgánica de la institución del orden público.
Agregó que incluso han sido separados oficiales que hacen un mal uso o manejo distorsionado de los policías a su cargo en una región o comandancia determinada.
Nuevo Paradigma
“Estamos mejorando y estamos sancionando; el nuevo paradigma de la seguridad ciudadana tiene como meta final cambiar la realidad actual para que la gente pueda sentirse más segura en las calles, en los campos, en las plazas, en todo el territorio. Los delincuentes no tienen ningún derecho a robarnos la paz a los ciudadanos de la República Dominicana”, aseguró.
Afirmó, no obstante, que el nuevo paradigma que se busca en materia de seguridad ciudadana no será alcanzado sólo con la actuación de la Policía Nacional, porque “ni la Policía, ni el gobierno pueden resolver por sí solos el problema; se requiere del concurso, el apoyo y participación de la ciudadanía, las entidades, las comunidades”.
“Se trata de que tomemos acciones específicas que impacten en la mayoría de los ciudadanos de este país. Las estadísticas indican que tenemos unos niveles de violencia que no se compadecen con la idiosincrasia de los dominicanos, pero ha habido una modificación de la conducta que no la veíamos hace veinte o treinta años”, observó.
Policías más preparados
Destacó que además de la cancelación de policías por la comisión de delitos y otras faltas graves, se han incrementado los cursos de formación.
“Necesitamos una policía más capaz, y por eso los estamos haciendo que vuelvan a estudiar. El 2017 finalizará con más de 20 mil cursos y diplomados, y el 2016 finalizó con 20,826 agentes que recibieron cursos de formación educativa”, proclamó.
Aseguró que el país cuenta con una policía más capaz, que cuando actúa descubre los delitos y las distintas manifestaciones de los crímenes. Igualmente se les ha mejorado el salario y sus condiciones de vida a ellos y a sus familiares con la inclusión en el Seguro Nacional de Salud y planes de viviendas, “pero también hemos sido drásticos con quienes se equivocan.
Las Mesas de Seguridad
Destacó que por disposición del presidente Medina se han creado las Mesas Locales de Seguridad, Ciudadanía y Género en distintas partes del país, que además de aglutinar a todos los sectores de una demarcación determinada, también son instrumentos de observación de la actuación policial en las provincias y sus municipios y parajes.
El propósito de esas Mesas es integrar al territorio a los trabajos de prevención con Juntas de Vecinos, las iglesias, organizaciones comunitarias para que el tema de la seguridad ciudadana no sea visto únicamente desde la Capital, que se vea también en el territorio, en el lugar donde ocurren y abordar las faltas con nombre y apellido.
“Aspiramos a una mejor policía, pero también a una participación activa de la ciudadanía”, puntualizó.
“Cuando vemos el caso de los homicidios, tenemos que alarmarnos, y aunque vienen bajando año tras año, tenemos que luchar para que esa tasa se reduzca”, reflexionó.
Amarante Baret dijo que para esta fecha en 2002 ocurrieron 2,268 homicidios y 1,198 en lo que va de año y que muchos de esos casos no tienen su origen en la delincuencia, sino por convivencia o feminicidios.
“Es increíble la facilidad con que los hombres deciden quitarle la vida a su compañera o a su ex compañera. Es un tema que tiene que ver mucho con la escuela, la educación y la formación hogareña, y debe reforzarse la capacidad del Estado para proteger y preservar la vida de las mujeres cuando se sientan amenazadas a través del Ministerio Público”, manifestó.
Reconoce que hay un problema de confianza entre el Policía y el ciudadana, una desconfianza que hace que muchas víctimas prefieran la callada a la denuncia.
Amarante Baret afirmó que desde el Consejo Superior Policial se viene trabajando arduamente para revertir esa falta de confianza, ya que desde el alto organismo se ha dispuesto o recomendado la cancelación de unos 7,068 agentes, desde oficiales superiores hasta subalternos, clases y alistados por la comisión de faltas graves.
Se trata, dijo, de estar acorde con la política y el deseo del presidente Danilo Medina de que se generen mayores niveles de seguridad ciudadana y de reducción de los homicidios y feminicidios. Indicó que esas separaciones de quienes definió como malos policías se han producido al amparo de lo que dispone la nueva Ley Orgánica de la institución del orden público.
Agregó que incluso han sido separados oficiales que hacen un mal uso o manejo distorsionado de los policías a su cargo en una región o comandancia determinada.
Nuevo Paradigma
“Estamos mejorando y estamos sancionando; el nuevo paradigma de la seguridad ciudadana tiene como meta final cambiar la realidad actual para que la gente pueda sentirse más segura en las calles, en los campos, en las plazas, en todo el territorio. Los delincuentes no tienen ningún derecho a robarnos la paz a los ciudadanos de la República Dominicana”, aseguró.
Afirmó, no obstante, que el nuevo paradigma que se busca en materia de seguridad ciudadana no será alcanzado sólo con la actuación de la Policía Nacional, porque “ni la Policía, ni el gobierno pueden resolver por sí solos el problema; se requiere del concurso, el apoyo y participación de la ciudadanía, las entidades, las comunidades”.
“Se trata de que tomemos acciones específicas que impacten en la mayoría de los ciudadanos de este país. Las estadísticas indican que tenemos unos niveles de violencia que no se compadecen con la idiosincrasia de los dominicanos, pero ha habido una modificación de la conducta que no la veíamos hace veinte o treinta años”, observó.
Policías más preparados
Destacó que además de la cancelación de policías por la comisión de delitos y otras faltas graves, se han incrementado los cursos de formación.
“Necesitamos una policía más capaz, y por eso los estamos haciendo que vuelvan a estudiar. El 2017 finalizará con más de 20 mil cursos y diplomados, y el 2016 finalizó con 20,826 agentes que recibieron cursos de formación educativa”, proclamó.
Aseguró que el país cuenta con una policía más capaz, que cuando actúa descubre los delitos y las distintas manifestaciones de los crímenes. Igualmente se les ha mejorado el salario y sus condiciones de vida a ellos y a sus familiares con la inclusión en el Seguro Nacional de Salud y planes de viviendas, “pero también hemos sido drásticos con quienes se equivocan.
Las Mesas de Seguridad
Destacó que por disposición del presidente Medina se han creado las Mesas Locales de Seguridad, Ciudadanía y Género en distintas partes del país, que además de aglutinar a todos los sectores de una demarcación determinada, también son instrumentos de observación de la actuación policial en las provincias y sus municipios y parajes.
El propósito de esas Mesas es integrar al territorio a los trabajos de prevención con Juntas de Vecinos, las iglesias, organizaciones comunitarias para que el tema de la seguridad ciudadana no sea visto únicamente desde la Capital, que se vea también en el territorio, en el lugar donde ocurren y abordar las faltas con nombre y apellido.
“Aspiramos a una mejor policía, pero también a una participación activa de la ciudadanía”, puntualizó.